Dj Vu

Déjà Vu

Tras un decepcionante año,  mucho interés era el que se despertaba este verano con los movimientos en la plantilla blaugrana y como se desenvolvería la pareja Llaneza- Nacho Rodríguez.

El seguidor culé tenía el convencimiento de que la catástrofe sufrida la anterior temporada era tan previsible, que desde meses atrás se había estado trabajando en el próximo año. Pero rápidamente se empezó a ver que algo no acababa de ir bien. Tras la eliminación, pasada una semana empezó la marea de bajas, incluyendo la rescisión de Bartzokas.

Todos nos ilusionamos con un nombre, Saras, pero al final no llegó, y la realidad es que nadie sabe muy bien el porqué. Oficial, solo sabemos que Saras dijo que la oferta era de las más flojas que había recibido este verano. Y tras el primer plan A frustrado llegó Sito, entrenador que nos gusta y que puede hacer crecer un nuevo proyecto.

Siguió un tiempo de dudas en el que no se cerraba nada (exceptuando Thomas Heurtel), y sonaban nombres casi fichados, que a última hora, se escapaban por no saber cerrarlo a tiempo o irrupciones de la NBA, como sucedió con Darius Miller. Tras la decepción de Darius, se pasó a un punto donde el Hype fue máximo pues se cerraron varias incorporaciones de composición de fondo de armario más que interesantes y grandes nombres en el horizonte. Estas incorporaciones fueron el francés Moerman y el deseado Pierre Oriola que daban al equipo un punto de carácter y garra que tanto nos faltó el año pasado. Aunque lo que de verdad levanto el ánimo fueron los dos ofertones presentados tanto por Larkin como por Hanga. Y para éxtasis total, suena un jugador bastante interesante como Moustapha Fall. Dos jugadores top 5 en Europa en sus posiciones que de verdad darían a la decaída hinchada culé una inyección de ánimo y un proyecto sólido e ilusionante en el que creer. Todo muy bonito pero la realidad no es tan fácil. Fall se fue a un recién ascendido en Turquia, y el club entró en una partida de ajedrez con Josean Querejeta en la que se jugó con el tanteo, los plazos, brutos, netos y al final todo quedó en nada. Larkin aceptó la oferta de Boston pues la primera intención del jugador fue siempre su regreso a la gran liga, aunque en nuestra opinión se pudo hacer algo más si al principio de la operación se negocia con Baskonia y nos dejamos de guerras con un hombre que se las sabe todas. El tema Hanga no tiene menos chicha, con un jugador que no quiere volver a Baskonia, que San Antonio (franquicia con sus derechos NBA) le niega el cumplimiento de su sueño y por el que parece que el Barça tendría alguna opción. Pues el club se planta y deja de negociar y se lanza a por un plan “B” que a algunos nos resulta más “C” o incluso “D” como Phil Pressey. Esta situación deja a los aficionados fríos y sin nada a lo que agarrarse con posibles llegadas.

¿Y ahora qué? Pues como nota de color, aparece un viejo deseo de muchos de los seguidores blaugranas Rakeem Sanders. Un alero con un físico portentoso y que a muchos encanta y al que se le da por cerrado (solo falta la oficialidad por parte del club). El club lejos de forjar una dupla espectacular con Hanga parece que se decide por una opción más económica, pero en principio aceptable como es Matt Lojeski. Un jugador al que si su físico respeta cumpliría aceptablemente su papel de 2/3 de rotación que aporta defensa y tiro exterior. El problema es que ya tiene 32 años y las lesiones no le respetan últimamente. Esto puede empezar a parecer que el club baja las expectativas, pero hay otra situación que genera aún más dudas. Pasemos al puesto de base donde encontramos el problema. Se pasa de una dupla Larkin-Heurtel que estaría muy valorada en la contienda europea a una pareja muy random como sería la formada por el base francés y Phil Pressey. Phil Pressey es un jugador con experiencia NBA, que viene de D-league y que genera muchas dudas. Mucha gente duda de su capacidad de toma de decisiones y la de saber controlar el tempo de un partido, se destacan algunas carencias en su juego: una muy mala selección de tiro que provoca que sus porcentajes de acierto bajen y un preocupante ratio de pérdidas, muy en concordancia con la mencionada falta de control del tempo. Para nosotros el principal problema se basa en su nula experiencia en Europa, después de una temporada dando tumbos el proyecto no le puede dar la dirección a un base que no sabes si te puede salir un “bluff” de campeonato. Pasar de Larkin que viene consagrado del año pasado a Pressey (descartado por Unicaja por falta de experiencia) supondría un bajón importante. La intención no es juzgar a un jugador antes de que haga nada, simplemente sería una apuesta arriesgada y aunque podría salir bien no consideramos sea el momento para experimentos en un puesto tan importante como el de primer base.

Para terminar con la situación de posibles incorporaciones pasamos al 5 que sería para nosotros la clave. Queremos pensar que esa forma de recular en el tema Hanga se debe a un posible esfuerzo económico por un 5 de garantías y que pueda ser una referencia. Hay dos grandes nombres con pasaporte comunitario: Donatas Motiejunas y Kevin Seraphin. Cualquiera de los dos son grandísimos jugadores pero nos decantamos por el segundo porque se adaptaría más a las necesidades de la plantilla y de ponerse a tiro podría ser más sencillo de fichar, aunque el primero es el sueño de cualquier aficionado ya que por calidad sería top1 en Europa. Se hace muy necesario el esfuerzo tanto económico como deportivo pues no podemos quedarnos a medias como el año pasado, ya se vio el resultado nefasto de dejar una plantilla a medio hacer.

Por último, no queríamos dejar pasar por alto la situación de Tyrese Rice en el equipo. El jugador se encuentra aparentemente fuera de los planes tras un problema disciplinario y de profesionalidad que es difícil de pasar por alto. No obstante, no hay que olvidar que es una de las fichas más altas de la plantilla y hasta el momento no se ha conseguido una rescisión amistosa. En nuestra opinión sería un gravísimo error el indemnizar la ficha en su totalidad y que se marche a reforzar otro roster de la competencia. Está claro que la situación extradeportiva del año pasado del jugador no fue la mejor, pero en los tiempos que corren y con las dificultades para fichar jugadores de calidad no podemos olvidar a Rice. Pues el año pasado para nosotros fue la gran esperanza y calidad tiene a reventar. Aparentemente no existía una posibilidad de redención para él, pero tras perder a Larkin y ver que la alternativa podría ser low cost, creemos que, si Sito lo considera recuperable, se le debería involucrar en el nuevo proyecto y darle una última oportunidad. Tal como está el mercado y dependiendo de la actitud con la que quiera afrontar la temporada Tyrese se debería intentar y no dar por perdido a un jugador que hace un año y medio era uno de los tres mejores bases de Europa. Sobretodo porque el equipo que se esta haciendo solventa uno de los problemas que había el año pasado, la falta de carácter.  Pero con la baja de Rice, no solo no se solventa, sino que incluso empeora otro de los grandes problemas, la falta de calidad.


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